Este lunes debía haberse celebrado en la biblioteca mayor de esta remota villa un encuentro con Ana Iris Simón, la autora de la multirreeditada y multipublicitada (viral, se dice ahora) Feria, un relato de formato autobiográfico, mezcla de homenaje al linaje familiar y la vida de aldea y de catálogo de las perplejidades de la generación nacida en los años noventa. El viejo se interesó por el tema y leyó el libro, a sabiendas de que se metía en camisa de once varas, y se dispuso a asistir al encuentro con la autora, que se ha suspendido porque, al parecer, la joven escritora no tenía con quién dejar a su hijo pequeño, o para decirlo en la aparatosa jerga que ella desdeña en su libro, por no poder conciliar la vida profesional y familiar. Esta alegación cuadra con el mensaje neotradicionalista de la autora, aunque para no acercarse a la remota provincia subpirenaica cualquier pretexto es bueno y este viejo, sin ir más lejos, en ocasiones ha puesto a sus nietas como excusa para eludir algún compromiso indeseado.

Como quiera que sea, cierta crítica ha entronizado a Ana Iris Simón como mater et magister del movimiento neorrancio, término que vendría a identificar a una izquierda que acepta en su programa valores y premisas conservadoras. El hecho de que el preboste voxiano don Santiago Abascal subiera en cierta ocasión a la tribuna del congreso con un ejemplar de Feria en la mano ha ayudado a fomentar la leyenda, aunque nadie sabe si el ilustre diputado lo ha leído. La lectura del libro y la atención a las innumerables entrevistas que ha dado la autora y que pueden revisarse en you tube no dan para tanto. Simón es una ágil y atinada prosista, observadora sagaz de los detalles del entorno, que hilvana en un relato más entretenido que interesante, pero como pensadora no es Hegel y como novelista no es Balzac. Si la crianza de los hijos no se lo hace imposible, podrá alcanzar mayores empeños. Aún le queda tiempo para experimentar por qué la vida que llevaron sus mayores no es necesariamente envidiable, como pregona en el frontispicio de su libro.