Lo crean o no, la ‘jura de Santa Gadea’ es la imagen en la que se ve don Ramón Tamames en la tribuna de congreso cuando predique la censura de don Sánchez.

Abres los ojos a la luz del día y ahí están unos y otros esperándote para moldear tu ánimo de buena mañana, ya sea con una risa tonta o una depresión inabarcable.

El buen pueblo encontraba una causa que le aliviaba del tedio bíblico del séptimo día y a la que podía adherirse sin que los guardias le molieran la espalda.

‘Menos aplausos y más armas, hay que hacer más y más rápidamente’, ha predicado el alto comisionado para asuntos exteriores de la Unión Europea.

Matabas toros porque también te podían matar a ti, no los toros, que son inofensivos fuera de la plaza, sino tus congéneres humanos.

Un salario de cuatrocientos mil euros es más bien modesto habida cuenta las colosales plusvalías que contabilizada el capital en estas fechas.